Sitges 2022
Crónica de la última edición del festival de cine fantástico, en la que el autor observa que las películas indagan su propia identidad evocando la estética de la serie B o motivos recurrentes del género.
Crónica de la última edición del festival de cine fantástico, en la que el autor observa que las películas indagan su propia identidad evocando la estética de la serie B o motivos recurrentes del género.
El cronista se acerca a una edición del festival marcada por el Covid-19, donde sobresalieron películas como «Un efecto óptico», «L’État sauvage», «My Heart Can’t Beat Unless You Tell It To», «La Nuée», «Mandibules» o «Teddy».
Última crónica desde el festival de cine fantástico, donde la identidad es clave al hablar de lo nuevo de Terrence Malick, Mateo Gil, Colm McCarthy y Dan Kwan y Daniel Scheinert.
Cabe blandir una lanza en favor de ese público maltratado por diversos medios de comunicación. Un público que no está aplaudiendo ni la Guerra de Iraq, ni el 11-S, ni los tsunamis de Indonesia, tan solo la emoción que despierta ver en una pantalla la representación más próxima al “horror” que el cine puede permitirse…