Bellflower
«Bellflower» muestra de inicio su ambivalencia con una puesta en escena que, como le ocurría a Dalí cuando contemplaba El Ángelus de Millet, nos perturba al evidenciarnos que hay algo oscuro tras aquello que relata su plácida narración.
«Bellflower» muestra de inicio su ambivalencia con una puesta en escena que, como le ocurría a Dalí cuando contemplaba El Ángelus de Millet, nos perturba al evidenciarnos que hay algo oscuro tras aquello que relata su plácida narración.